Los gaditanos van a terminar acostumbrándose al paragüas y al chubasquero. Sigue el temporal. La provincia de Cádiz continúa en alerta amarilla por la posibilidad de fuertes lluvias y rachas de viento. Tres de las carreteras que tuvieron que ser cortadas durante la jornada del martes por la gran cantidad de agua y barro acumulados en la calzada continúan sin circulación. Estas son la A-393 en Espera, la CA-5101 en el término municipal de Arcos y la CA-9101 en Olvera, según confirma la Dirección General de Tráfico.
Durante toda la madrugada ha llovido con fuerza en gran parte de los municipios gaditanos; sin embargos, fuentes del Consorcio Provincial de Bomberos aseguran que no se han registrado incidencias destacables. Los efectivos sí han vuelto a la población de Arcos en labores de reconocimiento tras los aguaceros de ayer.
Ayer las rachas de viento que azotaron la provincia, las lluvias volvieron a ser las protagonistas. Uno de los lugares donde más agua cayó en la Bahía fue San Fernando, donde se recogieron más de 42 litros por metro cuadrado
Los bomberos del Consorcio Provincial se emplearon a fondo y no solo en La Isla. Más de 40 intervenciones engrosaban al cierre de esta edición la lista de intervenciones de emergencias atendidas por los diferentes parques gaditanos.
Como es habitual en estas ocasiones, la mayoría de las actuaciones estuvieron relacionadas con inundaciones en la vía pública, achique en viviendas, garajes y locales comerciales, o rescates de vehículos y retirada de árboles y carteles de la vía pública.
El grueso de las intervenciones se registraron por la mañana en Sanlúcar y San Fernando, donde se intervino en el patio de un colegio y en una guardería.
Hasta 90 litros
Al mediodía, los efectivos de emergencias intensificaron su trabajo en Jerez y Algeciras. Tuvieron que rescatar un vehículo arrastrado por una riada en la carretera entre Benalup y Vejer, que a última hora de la tarde aún no había aparecido.
Afortunadamente, este nuevo temporal no ha ocasionado daños personales. En municipios como Chiclana, Medina o El Puerto, la acumulación de bolsas de agua fue una constante.
En Cádiz capital se contabilizaron una decena de salidas, algunas ya clásicas, como la inundación de los alrededores del Carranza o de parte del Campo de Sur. Los bomberos también intervinieron por riesgo de derrumbe en la calle Fermín Salvochea, 7, tras la inundación de una azotea.
Por otra parte, en la Sierra de Cádiz, el municipio de Arcos fue uno de los más afectados ayer por las precipitaciones. El Sistema Automático de Información Hidrológica del Guadalquivir registró casi 60 litros por metro cuadrado en esta localidad, sólo superado por los más de 90 litros que se contabilizaron en Olvera. Entre las emergencias más destacadas estuvo la evacuación de los alumnos del colegio El Santiscal, en Arcos, que tuvieron que abandonar el centro en autobús porque la instalación se encontraba totalmente rodeada de agua.
Asimismo, durante buena parte del día un total de siete carreteras de la red secundarias vieron restringido el tráfico a causa de la lluvia y la presencia de gran cantidad de barro en la calzada. Fueron la A-389 en el kilómetro 21, en el término municipal de Medina Sidonia, la A-393 de Espera, y las CA-6103, CA-6105, A-382 (p.k. 21,5) y CA-5101, todas en Arcos. La mayoría de ellas habían reabierto a la circulación al cierre de esta edición.
Fuente: La Voz de Cádiz
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